martes, 22 de noviembre de 2011

IDENTIDAD NACIONAL




























Las urnas finalmente hablaron. Y los españoles han dado mayoritariamente su confianza al Partido Popular para enderezar una nave sin rumbo en la que se ha convertido España durante los últimos años.


Nunca antes en nuestra joven democracia se había dado una concentración de poder municipal, autonómico y nacional tan brutal como el acontecido en los últimos meses. Por este lado, Mariano Rajoy y su partido no tendrán ningún tipo de cortapisa para aplicar las políticas que realmente necesita este país en términos de gestión económica y presupuestaria. Pero mis dudas surgen si el Partido Popular se va a centrar exclusivamente en resolver este desaguisado económico atendiendo únicamente a soluciones númericas. Me explicaré.


Todos sabemos que el agravamiento de esta crisis económica propiamente española (sumada a la crisis económica europea y mundial) ha sido provocada por un desacertado incremento del gasto público que ha dejado las arcas vacías y sin capacidad de maniobra futura. A saber: Plan E (15.000 millones de euros), cheque de los 400 euros y cheque bebé (5.000 millones) o subvenciones a sindicatos y patronales (1.000 millones), por poner tres ejemplos. Pues bien, parece obvio que la recuperación económica vendrá en primer lugar por una reducción del gasto público drástica para iniciar una senda que nos lleve en unos años a la consolidación fiscal, es decir, a intentar ajustar nuestro gastos a nuestros ingresos.


Para mí esto es un primer paso necesario pero no suficiente. Porque en anteriores crisis sufridas todas se superaron de la misma forma: a través de una devaluación de nuestra moneda que hizo que nuestros productos y servicios fueran más competitivos para el resto de países. El problema que tenemos ahora al compartir la moneda es que esa herramienta ha dejado de existir por lo que la única posibilidad de hacer nuestros productos y servicios más competitivos es reducir su coste, o lo que os lo mismo, ser más productivos.


¿Y cuál es nuestra principal industria, con diferencia sobre el resto? Pues el turismo. Ahí está una de las claves de la recuperación que nos puede llegar a corto plazo. Teniendo en cuenta que hemos incrementado cerca de un 10% con respecto al año pasado la llegada de turistas (debido principalmente a las revueltas del norte de Africa), tenemos que intentar como sea, ofrecer al turista algo distinto y que llame su atención, con el objetivo de que siga comprando nuestro producto estrella. Y lo que dicen los expertos en este tema es que cada vez más, se valora el turismo cultural y gastronómico.


Y tenemos la fortuna de vivir en un país donde el patrimonio histórico es abundante y único. Sin embargo, una parte importante está en la más absoluta ruina y es ahí donde se deberían destinar los fondos suficientes para crear un Plan nacional de restauración del patrimonio histórico. Porque se matarían varios pájaros de un tiro: se reactivaría la actividad de la construcción donde tenemos a una buena parte de nuestros parados, provocaría un incremento del turismo hacia esos lugares con las ventajas que eso conlleva (gastos de pernoctación, restauración, visitas, etc.) y se recuperaría también parte de nuestra identidad nacional necesaria en este contexto tan difícil.


Porque es vital cuanto antes recuperar la perspectiva de donde venimos para saber sobre todo, hacia donde vamos. Espero que alguien con el poder suficiente dentro del futuro gobierno rajoy, sepa ver las ventajas de esta medida. Por mí que no quede, siendo la segunda vez que lo propongo desde este modesto blog:





Plan de choque contra la crisis Mayo de 2008



Y para muestra varios botones:



Patrimonio histórico nacional en ruinas



viernes, 18 de noviembre de 2011

JORNADA DE REFLEXIÓN




La verdad es que uno al recordar los buenos momentos en la vida, éstos pasan irremediablemente por el disfrute de la naturaleza y todo lo que nos ofrece. Mañana, sin embargo, nos jugamos mucho, pero creo que merece la pena relajarse antes y escuchar canciones que merecen la pena junto a imágenes que nos resultan simplemente hermosas. Que reflexionen bien:



sábado, 5 de noviembre de 2011

LOS HEROES ESPAÑOLES OLVIDADOS



































Llega la hora de la verdad. Sí, el 20 de noviembre de 2011 puede ser un punto de inflexión para nuestro país después de la desastrosa gestión del gobierno Zapatero durante los últimos siete años y medio. Gestión que más allá del desastre económico provocado, en mi opinión, el verdadero problema ocasionado ha sido la búsqueda permanente del enfrentamiento entre españoles, de volver al reciente pasado guerracivilista, del cordón sanitario contra el principal partido de la oposición, de la vergonzante negociación con una banda terrorista, del enfrentamiento con las creencias católicas que durante siglos perduran en España, en definitiva, del intento constante de socavar los cimientos de una nación que todavía hoy representa una de las principales referencias históricas, religiosas y culturales en la Historia de Humanidad.


¿Sorprendidos por mi afirmación?. Ya desde la invasión romana empezó a forjarse la nación española, Hispania se hizo llamar. Los romanos dotaron a nuestro territorio de una estructura organizativa y legal, los visigodos después de la caída del Imperio romano le dotaron de una estructura de estado hasta quedar reducida a Covadonga. Después de varios siglos de ocupación y de influencia árabe, se llega a la Reconquista total en 1492 con los Reyes Católicos que culminan el proceso de unión de los diversos reinos cristianos, manteniendo por cierto cada uno de ellos su propia idiosincrasia e identidad pero embarcados en un proyecto común llamado España.











El embajador de la República de Venecia se entrevistó en su momento con el rey Fernando V, El Católico, y le preguntó que como era posible que el pueblo español siendo tan belicoso hubiera sido invadido en tantas ocasiones. El Rey asintió diciendo que efectivamente éramos un pueblo belicoso pero que hasta la llegada de ellos los distintos territorios nunca habían estado unidos y por eso habían sido tan vulnerables. Ahora que eso se había conseguido eliminar, nada podría parar a la nación española. Y así fue durante varios siglos. Y quiero remarcar que solamente ha habido dos imperios en la Historia de la Humanidad que por su extensión y duración han sido los más importantes. Uno Roma que llevó a cabo el ciclo completo desde su nacimiento, desarrollo y desaparición total (Italia es una nación de dos siglos de existencia únicamente ) y otro el español (América, parte de Africa y Asia, Europa Central y Sur) que llega hasta nuestros días de una forma insignificante pero sin haberse disuelto la nación. Todavía.



Pero yo me pregunto por qué razón esto no es motivo de orgullo en nuestro país. Por qué la gente, la ciudadanía no conoce nuestro pasado y por tanto no se identifica con él y con todo lo logrado a través de los siglos. ¿Por qué todo queda reducido a un pasado reciente identificado con el franquismo y más allá de eso nada hay? ¿Cual es el verdadero motivo para pensar que por llevar una bandera de España en el coche, en una camisa, polo o pulsera a uno le tachan de facha cuando es nuestra bandera desde el reinado de Carlos III en el siglo XVIII? Pues esto para mí tiene un culpable claro pero les dejaré a ustedes que lleguen a esa conclusión.




¿Qué país hemos construido en los últimos años que ignora nuestro pasado y más en concreto héroes que han forjado en su momento un imperio universal que ha llevado sin ir más lejos unas estructuras organizativas, una lengua, cultura y una religión a lugares desconocidos? Sí, muchos dirán que se cometieron actos inapropiados y no deseados pero yo siempre digo lo mismo, no se pueden analizar hechos pasados con una perspectiva actual. Es imposible y un error imperdonable si eso es el verdadero motivo para ningunear nuestro pasado heroico. Y si eso fuera así, ¿Por qué naciones como la inglesa o la francesa, por poner dos ejemplos cercanos, se sienten orgullosas de su pasado? ¿Es que los franceses o ingleses conquistaban nuevos territorios únicamente a través del diálogo con sus enemigos?



Yo sólo digo una cosa al respecto. Investiguen y lean ya no sólo la historia de nuestros reyes desde Alfonso VI, Alfonso VIII, Fernando III, Isabel I y Fernando V pasando por Carlos I, Felipe II, Felipe V o Carlos III que quizás puedan ser los más conocidos. Yo les invito desde esta modesta tribuna a que sepan los logros y hazañas de otros héroes españoles olvidados y que gracias a ellos somos lo que somos hoy , aunque cueste creerlo: Rodrigo Díaz de Vivar, Alonso Pérez de Guzmán, Gonzalo Fernández de Córdoba, Diego de Almagro, Vasco Núñez de Balboa, Antonio de Leyva, Alejandro Farnesio, Alvaro de Bazán, Ambrosio Spínola, Blas de Lezo y Olavarrieta, Francisco Javier Castaños, Agustina Zaragoza o Angel Sanz Briz. Estos son sólo una pequeñísima muestra de gentes que han logrado gestas que para sí, quisiera cualquier nación haber visto y que estoy seguro tendrían homenajes constantes relacionados con sus nacimientos, muertes o hazañas logradas.


¿Y cómo se puede unir esto a una fecha tan señalada como la del 20 de noviembre próximo? Pues sencillamente a que únicamente confío en un gobierno presidido por Don Mariano Rajoy que tenga la altura de miras de recuperar nuestro pasado. De honrar a todas estas personas que siguen olvidadas en el colectivo de una nación, nación que ahora mismo se encuentra perdida y sin rumbo. Ahí en mi opinión, empezará a forjarse una nueva etapa de prosperidad y auge económico. La fórmula no la sé (podemos hablar desde un museo específico dedicado a ellos, monumentos y calles con sus nombres, restauración del inmenso patrimonio histórico que todavía tenemos, la divulgación por los medios de comunicación públicos de documentales específicos acompañados de expertos en la materia, obligar a impartir la misma asignatura de historia de España en todas las comunidades, un día festivo a nivel nacional, etc.) pero lo que sí sé es que para avanzar y recuperarnos de esta crisis económica y de valores no es suficiente acertar con las políticas económicas que se apliquen, que hace falta algo más, hace falta recuperar el orgullo y el espíritu nacional que una vez, no sé cuando, lo perdimos en el camino de la historia.


Tengo la esperanza de que se recupere para el bien de todos. Para el bien de España.